Una vez barnizado el terreno, me dedico a construir por un lado las cabañas de los tramperos, que serán dos, y los teepees indios, que serán 4.
Para ello cojo unas cartulinas un poco más duras de lo normal, y calculo con uno de los soldaditos, cuales pueden ser sus medidas. Para los teepees, me ayudo de un compás y para ambos, cabañas y teepees, hago las construcciones en una sola pieza, pego con cola blanca y una vez secos les doy a todas las construcciones un lavado con cola blanca diluida en agua y dejo secar.
Para las chimeneas de las cabañas, hago un cuadrado y luego corto a ras, respetando la caída en ángulo del techo para que encaje lo mejor posible.
Una vez hecho esto, pinto tanto las cabañas como los teepees y decoro estos últimos para darle mayor credibilidad, añado algo de algodón a las chimeneas simulando el humo, y añado un totem mínimamente decorado para darle algo más de significado al poblado indio.
Y con esto, doy por acabado el tablero de juegos. A los destinatarios les ha gustado bastante y ya estamos pensando en comprar romanos o napoleónicos u otra época para poder usarlos en el terreno, que por otra parte, es perfectamente adaptable a cualquier época.
Gracias por leerme.